La coliflor es un vegetal que contiene una impresionante variedad de nutrientes, incluyendo vitaminas, minerales, antioxidantes y otros fitoquímicos.
La coliflor es originaria de las regiones del Mediterráneo oriental, en concreto de Asia Menor, Líbano y Siria, en donde no era consumida como alimento, se utilizaba principalmente para tratar algunas enfermedades como el dolor de cabeza o la diarrea.
Existen muchas variedades de coliflor, pero la más común es la coliflor blanca, la ausencia de color se debe a que los agricultores unen por encima de la mata las hojas verdes que la rodean, lo que impide la entrada del sol e inhiben el desarrollo de la clorofila, pigmento que le confiere el color verde ciertos vegetales.
Ahora te presentamos cinco razones, comprobadas científicamente, por las que la coliflor debe formar parte de tu dieta:
- La coliflor es un alimento con un perfil nutricional muy completo, pues contiene gran cantidad de vitaminas y minerales, por ejemplo: vitaminas C y K, potasio, magnesio, manganeso y fósforo, también, tiamina, riboflavina, niacina.
- La coliflor tiene gran cantidad de glucosinolatos e isotiocianatos, dos antioxidantes que podrían ayudar a detener el crecimiento de las células cancerígenas.
- La coliflor contiene gran cantidad de nutrientes antiinflamatorios, como el indol-3-carbinol o I3C, que opera a nivel genético y ayudar a prevenir las reacciones inflamatorias en su nivel más fundamental.
- Este vegetal es fuente importante de fibra. La fibra juega un papel importante a la hora de prevenir la obesidad, pues genera sensación de saciedad y esto hace que se reduzca la cantidad ingerida.
- Cien gramos de coliflor contienen sólo 5 g de carbohidratos de muy bajo índice glucémico, muchísimos menos que los presentes en la misma cantidad de arroz, pasta, patata o harinas, por eso es una muy buena alternativa para sustituir a estos ingredientes en dietas bajas en carbohidratos.
En 2016, la producción nacional de coliflor contabilizó 75,796 toneladas, el estado líder fue Guanajuato con 17,300 toneladas, seguido por Hidalgo y Puebla con: 15,400 y 14,180 toneladas respectivamente.