Un joven que práctica actividades agrarias en los terrenos de una granja cuenta con muchas ventajas que lo impulsan a ejercer estas labores de manera profesional, por el resto de su vida.
Los jóvenes rurales favorecen el desarrollo de la sociedad al participar en el proceso de producción de los alimentos en el campo, donde logran generar ingresos económicos y adquirir tanto conocimientos como habilidades que fortalecen su aprendizaje y desempeño laboral.
A la juventud rural le debemos la producción de los productos agrarios que consumimos, lo que se traduce, a su vez, en estabilidad del sector alimentario. Asimismo, es importante mencionar que su ámbito es un gran generador de empleos que aportan crecimiento a nuestro país.
Por lo anterior, cabe destacar que la agricultura es una actividad que los jóvenes urbanos también pueden ejercer profesionalmente, ya que es una vía que, además de brindarles la oportunidad de jugar un rol fundamental en el avance social, les permite obtener altos salarios, desenvolverse a largo plazo y no sufrir el estrés de las grandes ciudades.
Es necesario alentar a los jóvenes a dedicarse al trabajo en el campo, debido a que de ellos depende el futuro de la explotación y manejo de los recursos agroalimentarios, que tan fundamentales son para el consumo humano y el progreso de país, #MexicoAgroPotencia.
Si estás interesado en el campo y cuentas con grandes ideas para su desempeño, participa en el reto "Jóvenes al rescate del sector agropecuario y pesquero ".
En México, se estima que 20% de los jóvenes trabajan en el campo.