Invertir en la agricultura es una de las maneras más eficaces de reducir el hambre y la pobreza, en especial en las zonas rurales. Muchos países que han invertido constantemente en la agricultura están en camino de alcanzar el primer Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad la proporción de personas que padecen hambre. La FAO trabaja en colaboración con los gobiernos y el sector privado, con organizaciones nacionales e internacionales y con las instituciones financieras para aumentar el volumen y la eficacia de las inversiones en la agricultura y el desarrollo rural.
El papel de la FAO en las inversiones en agricultura
La inversión agrícola es una de las estrategias más importantes y eficaces para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza en las zonas rurales, donde vive la mayoría de los pobres del mundo.
El crecimiento del producto interno bruto (PIB ) en la agricultura ha demostrado ser al menos el doble de eficaz en la reducción de la pobreza frente al crecimiento de otros sectores (Banco Mundial, Informe sobre el desarrollo mundial 2008. Agricultura para el desarrollo).
Las regiones del mundo donde el hambre y la pobreza están hoy más extendidos han visto el estancamiento o la disminución de la inversión agrícola en la agricultura en las últimas tres décadas.
La erradicación del hambre en estas regiones y el aumento de la producción de alimentos requiere un aumento sustancial en el nivel de inversión en la agricultura, incluyendo importantes mejoras en el nivel y la calidad de la propia inversión del gobierno en el sector.
Desarrollo rural
La FAO estima que se necesitará una inversión adicional de 83 000 millones de dólares EEUU al año para cerrar la brecha entre lo que los países de bajos y medianos ingresos han invertido cada año durante la última década y lo que se necesita para el año 2050.
En otras palabras, la inversión anual en el sector agrícola tiene que aumentar en más de un 50 por ciento.
Las actividades de la FAO para fomentar la inversión en la agricultura y el desarrollo rural incluyen:
- Asesoramiento técnico y económico a los gobiernos sobre políticas y leyes que influyen en la inversión pública y privada
- Desarrollo de la capacidad de los gobiernos para diseñar y ejecutar estrategias de inversión multisectoriales y con múltiples socios alineadas con sus propias prioridades
- Ayuda a los países para diseñar, implementar y evaluar las inversiones, no sólo para la agricultura y el desarrollo rural, sino también para satisfacer las necesidades alimentarias y nutricionales de sus ciudadanos
- Apoyo técnico a las instituciones financieras internacionales asociadas para apalancar inversiones adicionales
- Apoyar el desarrollo y la implementación de las estrategias y planes de inversión sobre agricultura, seguridad alimentaria y nutrición de los países en el marco del Programa general para el desarrollo de la agricultura en África (CAADP) de la Nueva Alianza para el Desarrollo de África (NEPAD)
- Análisis de las tendencias e impactos de la inversión agricola extranjera ene los países en desarrollo
- Apoyo a las consultaciones internacionales sobre principios para la inversión agrícola responsable
El Grupo de trabajo interinstitucional (IAWG), compuesto por FAO, UNCTAD, FIDA y el Banco Mundial han desarrollado conjuntamente los Principios para la inversión agrícola responsable que respeta los derechos, medios de subsistencia y recursos (PIAR).
Estos llaman la atención sobre los derechos y medios de vida de las poblaciones rurales y la necesidad de inversiones en agricultura social y ambientalmente sostenibles.