Las empresas suelen tomar la diversificación de mercados como una estrategia para sobrevivir y mantenerse vigentes, es así como deciden realizar cambios, agregando valor a sus productos que les permitan crecer y expandirse.
Existen diferentes formas de diversificación, por ejemplo, cuando la empresa genera nuevos productos que no están relacionados con el producto principal, otra podría ser la integración de nuevos productos relacionados con la actividad principal de la empresa o bien la creación de nuevos productos que no tienen relación con la actividad principal de la empresa y está destinada a futuros clientes potenciales.
En este tema, el sector agropecuario se caracteriza por cambios tecnológicos que redundan en mejoras de la productividad, nuevos cultivos que se ajustan a las exigencias de un mercado internacional, nuevos esquemas organizacionales que dinamizan las formas de comercialización y modifican los métodos de inserción en el mercado mundial e incluso, el surgimiento de nuevos esquemas de desarrollo rural.
A muchas empresas agrícolas les ha ido bien con la implementación de nuevos cultivos que antes no eran tan populares, entre los que destacan las frutillas, berenjena, granadas, quínoa, cártamo, pitahaya, hierbas aromáticas/culinarias, solo por mencionar algunos.
Un aspecto relevante que le da valor agregado a los productos del campo y les permite ampliar sus mercados, es la sanidad e inocuidad de los mismos, por lo que la producción de orgánicos representa un mercado con muchas posibilidades para los productores.
Por otra parte, tenemos un que para diversificar los mercados agropecuarios puede ser una opción: el aprovechamiento de los residuos sólidos orgánicos, los cuales pueden ser comercializados para la elaboración de abonos orgánicos, que aumentan la porosidad y la aireación del suelo, contribuyen a elevar la absorción del agua de los suelos incrementando así su fertilidad.
Finalmente, una alternativa para el aprovechamiento de los residuos citados es la digestión anaerobia, que permite estabilizar esos desechos y que sean utilizados como combustible para energías limpias.