“No cabe duda que las medidas tomadas por cualquier Estado, gobierno o persona, ante cualquier situación puede afectar a mucha gente. Cabe señalar que la forma de arreglar las cosas es, que todas las partes estén completamente de acuerdo, gracias a una buena negociación”.
Por: Luis Hernández.
En meses anteriores, la presión del gobierno de Estados Unidos hacia México, en relación a la exportación del tomate al mercado norteamericano, ha causado múltiples controversias en nuestro país y el cuestionamiento principal es:
¿Será posible que el gobierno de USA, quiera poner un impuesto al tomate mexicano, cuando las estadísticas nos dicen que más del 90% del tomate que consume dicho mercado viene de nuestro país?
A pesar de que todas las estadísticas no nos permiten entender esta situación, no queda más que comprender que el mundo político, siempre va a afectar más que las necesidades básicas de un país.
Ante este hecho, muchos productores mexicanos, podrían optar por cambiar de cultivo, de primera instancia, cualquiera actuaría de este modo, pero si recordamos que la necesidad de tomates del mercado de USA, viene de México, lo más sensato sería, ser paciente y esperar que las cosas se calmen, que el Gobierno de este país, cambie dicha política.
Si recordamos el artículo anterior y hablamos de VISION EMPRESARIAL, lo primero que debemos pensar es, en el tema de costos operativos cuando exportamos tomate, así como, el precio que rige dicho mercado, si es oferta y demanda. La mayoría de los proyectos de invernadero que siembran tomate, exportan la producción a través de terceros, de tal forma, que si los productores de tomate mexicanos, dejan de exportar la producción, el precio de los tomates se incrementa, lo que provoca, que el precio de venta final, será repercutido en el consumidor final, o sea, que los mismos norteamericanos serán quienes paguen dicho aumento en el precio del tomate.
Pero las empresas no viven de supuestos, sino de utilidades, de tal forma que, como hemos comentado en artículos anteriores, el negocio de los invernaderos, se vuelve un tema de costos. Hasta donde vamos a seguir creyendo que los invernaderos, son un tema de moda o de negocios nuevos muy rentables, sin darnos cuenta, que el verdadero y noble negocio de los invernaderos, está en la calidad y rentabilidad de los proyectos, así mismo mi recomendación será siempre, que te enfoques en los costos operativos del negocio, en vez, de esperar, como decimos en México, sacarnos la LOTERIA, con un precio espectacular de venta de nuestro producto.
Nuestro país, en toda su historia, siempre ha vivido de crisis económicas y devaluaciones fuera de serie, pero los mexicanos, siempre sabemos salir de dicha crisis, de tal forma, que esta etapa de arancel al tomate de México, será pasajero y en menos de lo cante un gallo, como decimos en México, este tema será resuelto.
Mientras este tema se resuelve, vale la pena aprender de las experiencias, hacer un verdadero análisis de nuestro proyecto actual y encontrar las áreas de oportunidad, donde podamos reducir los mayores costos, ser más eficientes en la producción bajo invernadero, independientemente cual sea el producto que actualmente siembras, siempre existe la manera de hacer las cosas diferentes y más rentables.
El tomate mexicano, tiene y siempre tendrá un prestigio mundial, esta crisis, que en lo personal, siento que será pasajera, no va a opacar el esfuerzo de familias mexicanas que llevan años de tradición, en la producción del mejor tomate para el mundo.
Lic. Luis Hernández-Consultor
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