“Las cuestiones monetarias que se puedan tener estarán presentes a lo largo de la vida. Llámese ingreso o gasto que se realice dentro de alguna actividad. Por la que debemos estar conscientes de que muchos de ellos son constantes y no siempre puede asignársele una cifra concreta, pero si se puede prevenir con los datos anteriores.”

Por: Luis Hernández

Como se comentaba en el artículo anterior, sin personal en el invernadero, no sería nada fácil su operación. En esta ocasión mencionemos algunas recomendaciones operativas para que podamos controlar los costos, sin poner en riesgo la calidad y exportación del producto, con el mayor grado de rentabilidad y productividad posible.

Lo primero que tendríamos que definir, serían los costos, como en todo negocio, tendremos costos directos y gastos indirectos.

Costos directos: son los cargos por concepto de material, mano de obra y gastos correspondientes directamente a la fabricación, producción de un artículo determinado o de una serie de artículos o de un proceso de manufactura. Por lo que estos costos son, todo aquello que esté relacionado con la producción y empaque de la fruta, por ejemplo:

• Mano de obra.

• Semilla, plántula y sustrato.

• Fertilizantes.

• Agroquímicos.

• Control biológico y colmenas.

• Material de empaque y embalaje.

• Fletes para la exportación y gastos aduanales.

Gastos indirectos: son aquellos en que incurre una organización pero son difíciles de asignar o identificar, aparte de la actividad productiva de la organización. Dentro de un proyecto de invernadero tenemos varias opciones de este tipo de gasto, por ejemplo:

• Mantenimiento.

• Telefonía e internet.

• Recolección de basura.

• Energéticos: luz, agua, gas, etc.

• Certificaciones.

• Papelería y material de limpieza.

• Vigilancia.

• Combustibles y transporte.

• Refacciones y herramientas.

Una vez que se han definido nuestros costos y gastos, es más fácil determinar lo que nos cuesta producir un kilo o una caja de la fruta que voy a producir. Así como detectar donde debo concentrar mis esfuerzos para reducir mis costos y aumentar mis utilidades. Además de no desgatar al invernadero, con el ahorro de ciertos gastos que no harán la gran diferencia en mi rentabilidad, sin embargo si puedo poner en riesgo la calidad de la fruta o la inocuidad del proyecto, para las futuras certificaciones de calidad, necesarias para la exportación de mi fruta.

Por otro lado, en el tema operativo, uno de los puntos observados a lo largo de los años, es la falta de supervisión, en cada una de las áreas del invernadero. Una ventaja de este gran negocio agroindustrial, es que cada proceso, tanto de producción como de empaque, son medibles con el Control de Procesos, el cual marcó la diferencia en la industria hace años, buscando el objetivo de cualquier empresario: aumentar las Utilidades y Reducir los Costos.

No perdamos de vista que trabajamos con plantas vivas, al igual que un niño pequeño, que durante su crecimiento va al pediatra, para que lo midan y lo pesen, lo mismo pasa con cada planta que es sembrada en el invernadero, ellas también tienen un ciclo de vida, que va marcando su crecimiento, evitando enfermedades, así como su producción, siendo cada uno de estos factores 100% medible. Uno de los grandes desafíos de la industria, ha sido este, medir rendimientos, a tal grado que diversas industrias, hoy utilizan más robots que humanos, sin embargo en nuestra industria, la Mano de Obra, es vital para el buen funcionamiento de nuestros proyectos, además que se vuelve el mayor costo directo de nuestra operación.

En el próximo artículo, hablaremos sobre consejos útiles para la Exportación del producto. Como sabemos, no es nada fácil este tema siendo el punto medular para generar los ingresos y reducir el tiempo del retorno de inversión.

Lic. Luis Hernández-Consultor y Agricultor.

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