“El ataque de insectos no solo produce un daño directo, sino que también es generador de problemas en especial de los insectos transmisores de enfermedades virales, infecciones bacterianas y toxinas, que requieren de un cuidado fitosanitario inmediato.”

Por: Félix Varela

Uno de los factores que afecta actualmente la producción de cítricos es la aparición de la bacteria Candidatus liberibacter, que se transmite por el vector Diaphorina citri Kuwayama. Los estados más afectados son Quintana Roo, Campeche, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Chiapas, Hidalgo, Baja California Sur y San Luis Potosí, luego de su reporte en julio del 2009 en el municipio de Tizimín, Yucatán. Las plantaciones fueron afectadas por las medidas fitosanitarias implementadas para la erradicación de los arboles positivos por el Candidatius liberibacter.

La Diaphorina citri Kuwayama, es del phyllum artrópoda, de clase insecta, cuyo orden es hemíptera, y suborden sternorrhyncha, de la superfamilia psylloidea, del género diaphorina, de la especie citri, su clasificación es kuwayama, de nombre común: Psílido asiático de los cítricos. La hembra coloca sus huevecillos en los brotes tiernos y entre las hojas que comienzan a desplegar en cualquier variedad de cítricos. Los huevecillos tienen un color amarillo brillante hasta tornarse anaranjado. Son ovoides y alargados en uno de sus extremos, su tamaño es de 0.3mm de longitud y 0.14 mm de ancho. Algunas especies hospederas cuentan con 5 estados ninfales, de color anaranjado-amarillo, no presentan manchas en el abdomen, aplanadas ventralmente, con esbozos alares abultadas, ojos rojos compuestos con dos antenas de color negro. Y pueden lograrse en condiciones de 28°C en un lapso de 15 días.

La Norma Mexicana de Emergencia NOM-EM-047-FITO, menciona que la Diaphorina citri tiene preferencias por la familia de las Rutáceas, que afecta a los cítricos como la naranja dulce, limón mexicano, limón rugoso, naranja agria, pomelo, toronja. También existen hospederos alternativos, como el género Murraya spp. (Murraya paniculata (L.).

La Diaphorina citri está distribuida alrededor del mundo. Su primer reporte en América fue en el Caribe, a inicios de 1998 en la isla de Guadalupe y en junio del mismo año en Estado Unidos de América. Para 2001 se reportó en Florida, al siguiente año se localizó en Querétaro, México y posteriormente en los estados de Tamaulipas y Nuevo León. Para 2004 se extendió a Cuitláhuac, Veracruz, así como a Colima, Querétaro, San Luis Potosí, Tabasco y Yucatán. Hasta 2008 se detectó en Tijuana, Baja California, con lo que invade en su totalidad la citricultura mexicana.

Esto ha ocasionado la perdida de plantaciones citrícolas, debido a la muerte de los árboles en lapsos de 3-10 años. La cual ha avanzado y se ha detectado en huertos comerciales en cerca de 16 estados productores de cítricos. Una característica que distingue la presencia de Huanglongbing (HLB), es el moteado en las hojas con islas verdes, es decir, un moteado asimétrico y difuso en el que existen retrasos del crecimiento, junto con la caída del fruto, su deformación y poca coloración o enverdecimiento, así como las semillas abortadas. Además de desarrollar brotes amarillos, razón por la que se conoce como dragón amarillo, así como el engrosamiento de sus nervaduras o acorchamiento, que pueden deformarlas como orejas de conejo. Las alteraciones más comunes son su floración fuera de tiempo, caída de hojas, muerte de ramas, hasta la muerte del árbol.

La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), delimitaron las zonas bajo control fitosanitario, la eliminación de material infectado, aplicación de métodos de control del vector, toma de muestras, inspecciones, restricción o control de la movilización del material vegetal de especies hospederas de la enfermedad y conforme a lo establecido en el “Protocolo de actuación ante la emergencia por la detección de Huanglongbing”. Aunque cabe señalar que no hay variedades de copa, ni patrón resistentes a esta enfermedad, se espera generarlos a mediano y largo plazo. Por lo que el establecimiento de nuevas plantaciones, dependerá de un diseño que contemple medidas de manejo mediante un paquete sustentable que incremente la producción y se compensen las pérdidas provocadas por el HLB. Tomando en cuenta estas estrategias para logra el objetivo:

1. Alta densidad de plantaciones

2. Sincronizar la votación vegetativa

3. Manejo del riego y nutrición.