“Conocer y prevenir la gama de organismos que pueden atacar un cultivo, es un referente de ahorro para el productor, en beneficio de su bolsillo y eficiencia de su(s) plantación(es)”.
Por: Daniel Horcajo. Agro Huerto.
Es una especie que afecta especialmente a cultivos que se cultivan en invernaderos, pero también puede atacar a cultivos al aire libre o en el interior de las casas. Esta araña o ácaro blanco, ataca tanto a cultivos ornamentales como hortícolas.
La araña blanca o arañuela blanca, afecta de forma polífaga a distintas especies de nuestro huerto. Por el mundo, Polyphagotarsonemus latus se desarrolla preferentemente en zonas húmedas y con temperaturas cálidas.
Este ácaro es una plaga importante en las zonas tropicales durante todo el año. En las zonas subtropicales, es una plaga importante durante el verano y el otoño, si las condiciones meteorológicas son cálidas y húmedas.
Y en las zonas templadas, es una plaga durante los meses de verano, pero bajo las condiciones ambientales adecuadas de calor y humedad puede causar daños severos.
Se reconocen unas 50 plantas a las que ataca (plantas huésped), entre otras están el pimiento, la frambuesa, la planta del té, los cítricos, el tabaco y la patata. En invernadero, causan daños principalmente en pimiento, berenjena, tomate, pepino y en cultivos ornamentales como la azalea o la begonia.
También causa daños muy importantes en el Cannabis.
Los daños causados por Polyphagotarsonemus latus, consiste principalmente en deformación de hojas y tallos.
Los ácaros prefieren tejidos jóvenes en desarrollo, tales como hojas y flores jóvenes. El ácaro blanco succiona la savia produciendo deformaciones y cicatrices acorchadas.
En las hojas, la succión ocurre en la parte del pecíolo, lo que hace que la hoja se enrolle. Se deforma la parte apical de la planta y aparecen localmente decoloraciones marrones. Si no se controla, puede provocar la muerte de la planta.
En el caso del tomate, se produce una decoloración bronceada en el tallo, brotes terminales y envés de hojas jóvenes. Las hojas de los brotes se secan, con lo que las partes altas de la planta presentan apariencia de quemadas, con los tallos arrugados y decolorados. Las hojas se abomban y presentan nervios salientes.
En papa, forma manchas negruzcas de aspecto aceitoso en el envés de las hojas jóvenes, adquiriendo este, una coloración rojiza, asimismo ocurre en la planta de pimiento, donde además impide la floración o hace caer las flores doblándose la hoja por los bordes de forma irregular.
Para controlar la plaga de la araña blanca, es importante utilizar medidas culturales como: eliminar los restos afectados por el ácaro.
El mantener en un buen estado sanitario los cultivos, ayuda a controlar todas las especies de ácaros. Se recomienda mantener el área alrededor del cultivo libre de malas hierbas o plantas silvestres que puedan hacer huéspedes, lo que reducirá las fuentes de infestación.
En los cultivos estacionales, como el tomate o el pimiento, una vez que la cosecha haya terminado, los residuos de los cultivos deben ser destruidos para evitar que se conviertan en caldo de cultivo de los ácaros.
También se recomienda podar las plantas afectadas, eliminando las hojas y tallos que estén atacados.
Otros consejos a seguir, es evitar que se deposite polvo sobre las hojas. El que haya polvo depositado sobre las hojas, facilita el ataque por ácaros.
En el tomate se ha visto que es importante que las plantas estén bien regadas y nutridas. Se recomienda utilizar abonos orgánicos como el mantillo. El estrés hídrico (falta de agua), favorece la aparición de los ácaros.
Tampoco conviene pasarse con el abonado, porque un exceso de abono también favorece el desarrollo de esta plaga.
En la agricultura ecológica, para combatir esta plaga, se recomienda utilizar azufre y el aceite de neem. Ambos dan buenos resultados. Hay productos comerciales disponibles en ambos casos.
Si se quiere hacer un acaricida casero, se puede utilizar chile (guindilla o pimiento) picante, ajo y jabón líquido para lavar los platos. Hay estudios científicos donde se ha probado y se ha visto que esta mezcla da buenos resultados para controlar este ácaro blanco.
El chile contiene capsicina, que es una sustancia irritante para los insectos y ácaros, que hace que huyan del lugar, dejen de alimentarse y mueran.
El ajo contiene ciertos compuestos con azufre, que afectan al sistema nervioso de los insectos y ácaros, actuando como irritante y repelente.
El jabón sirve para que el producto se adhiera mejor a los tallos y hojas de las plantas. Y además, al entrar en contacto con los tejidos grasos de los ácaros, hace que mueran por deshidratación.