“Su producción va en aumento, más allá del veinte por ciento, a pesar de la situación que aún prevalece a nivel mundial. Su expectativa es continuar esta alza y alcanzar entre el 10 y 11 por ciento en exportaciones mexicanas”.

Por: Dra. Ma. Dolores García Suárez,

Dr. Héctor Serrano.

Los frutos berries

Las berries o frutillas que se cultivan en México, son bayas también conocidas como frutos del bosque. Las cuatro especies más importantes son: arándano azul o blueberry (Vaccinium corymbosum), zarzamora (Rubus ulmifolius), frambuesa (Rubus nativa) y fresa (Fragaria x ananassa Dutch). Por su contenido de fitoestrógenos, presentan una alta capacidad como antioxidante, para el mercado agrícola, son frutos considerados de alta rentabilidad y versatilidad.

Su producción aumenta año con año, enfrentándose a los desafíos del cultivo como lo es el clima. Aparentemente, el cambio de hábitos en la pandemia, ha traído un aumento en la compra de estos frutos, sobre todo los congelados. La mayoría son frutas de temporada durante los meses cálidos, algunas se pueden encontrar durante todo el año y varias hacia el principio del otoño. Así, el arándano es de mayo a septiembre, frambuesa de junio a julio, fresa de diciembre a junio y la mora de agosto a octubre.

Su descripción, indica que proceden de diferentes familias botánicas y son de diferentes especies vegetales. De las anteriormente mencionadas, tres pertenecen a la familia Rosaceae y el arándano a la Ericaceae. Las familias de berries se extienden no sólo a aquellas que son comestibles sino también a otras que pueden ser venenosas, y las familias botánicas a las que pertenecen son: Rosaceae, Ericaceae, Myrtaceae, Berberidaceae, Elaeocarpaceae; de estas familias, a sus frutos se les denominan en conjunto como berries o bayas, estos frutos coinciden en que todos son pequeños de color rojo, púrpura o casi negros, muy diferentes entre sí, aunque de aspecto similar por ser carnosos y poseer características metabólicas comunes. Las especies que pueden llegar a ser venenosas no son producidas en el campo, son especies endémicas que crecen en los bosques de manera silvestre.

Ciertamente e independientemente de su toxicidad, todos estos frutos contienen una fuente importante de nutrimentos, además contienen diversas sales minerales: potasio, manganeso, magnesio, cobre; además de un excelente aporte de vitaminas: A, C y E; así como también metabolitos secundarios como: polifenoles con propiedades antioxidantes como las antocianidinas, taninos y flavonoides (Kahkonen et al 2001), de igual forma, un importante aporte de fibra, que en conjunto proveen de una excelente fuente alimenticia con algunos principios activos, por lo que se convierten en especies de interés económico importante con un uso alimentario y/o farmacéutico; dentro de este grupo del uso medicinal se pueden incluir algunos de los frutos considerados como venenosos.

Las berries no son plantas consideradas como especies amenazadas, provienen de especies silvestres nativas de diferentes países, que en la actualidad han sido domesticadas. Muchas de ellas son híbridos o variedades que han sido cultivadas ya por mucho tiempo y reemplazado a las especies silvestres endémicas. De estas especies de berries, es como se han ido haciendo selecciones a lo largo de muchos años, se ha demostrado su gran capacidad adaptativa, rápido crecimiento, lo que ha permitido realizar su domesticación e hibridación de manera adecuada. Lo que a su vez, ha permitido que sus cultivos actualmente sean abundantes y muy productivos. Son especies que han demostrado tener actividad colonizadora, que desde el punto de vista adaptativo, son especies fuertes y resistentes que pueden fácilmente invadir terrenos.

En México las berries

En el año internacional de las frutas y verduras para la nutrición 2021, proclamado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las berries de México se encuentran dentro de los cinco principales productos agrícolas que son exportados al mundo. Por ello, se conoce su producción como las berries mexicanas en el mercado nacional e internacional. Así el arándano azul, frambuesa, fresa y zarzamora, se producen actualmente en 23 estados de la república mexicana, siendo Michoacán el productor más importante, le siguen Baja California, Jalisco, Guanajuato, Colima, Sinaloa, Tlaxcala y Puebla. La frutilla con más éxito en el cultivo es la zarzamora, le sigue la fresa, después la frambuesa y la de menor cultivo el arándano o blueberry. Esto se ha logrado con la inversión de diferentes empresas nacionales y extranjeras que han invertido en México y contribuido a convertirlo en un cultivo de producción mundial.

Las exportación de las berries mexicanas son hacia: Norteamérica en los Estados Unidos y Canadá, hacia Europa en: Países Bajos, el Reino Unido, Italia, Bélgica, Francia, Alemania y recientemente a China, con la idea de irse hacia los mercados de Medio Oriente y Asia. Debido a los retos que hoy se enfrentan con el tratado entre Estados Unidos y Canadá el T-Mec y la presencia de la pandemia causada por el virus Covid 19 que hoy ataca a la humanidad, siendo el estado de Jalisco el que lleva el liderazgo de las exportaciones de las berries mexicanas hacia el extranjero.

La industria mexicana de berries hoy es una de las más productivas, hace uso de la biotecnología como el cultivo de tejidos, para su producción, así como de todos los procesos de producción más actualizados que tengan que ver con el mejoramiento del ambiente, evitando cualquier posibilidad de pérdidas de la biodiversidad vegetal. Hoy México se encuentra dentro de los cinco principales productores de Berries a nivel mundial.

Las bayas

Las bayas en términos botánicos se definen como un fruto de múltiples semillas, de mesocarpio y endocarpio carnosos, que provienen de una flor de ovario súpero (Bowling, 2000). Por lo que las berries en términos botánicos, no son en realidad bayas verdaderas, el término ha sido extendido por fines comerciales, algunas de las berries son consideradas como poliaquenios como el caso de la fresa, drupas o polidrupas en la zarzamora y frambuesa, pero comparte algunos aspectos de su morfología externa como texturas y colores por las que se les ha englobado en el término de berries.

Lo característico de las frutillas, bayas mexicanas o berries mexicanas, es que sus semillas se encuentran de varios ovarios de la flor, formando polidrupas y poliaquenios, en particular para las zarzamoras, frambuesas y fresas, son frutas jugosas, redondas, de colores rojos intensos, de sabor dulce o agrio. Se generan a partir del ovario de una sola flor y la capa externa de la pared del ovario, se convierte en la porción carnosa y comestible del fruto y es el pericarpio diferente, que para la mayoría de frutos es el mesocarpio.

Principales frutos rojos cultivados en México.

Perspectivas para las berries mexicanas

El cultivo de las berries mexicanas, asegurará un buen desarrollo de alimentos saludables, la presencia de una buena calidad de nutrimentos, así como su contenido de nutrientes que permite una ingesta diaria.

Hoy en día, las investigaciones científicas para la mejora del conocimiento de las berries, debe ir encaminada a probar el uso eficiente de los metabolitos secundarios, presentes en los frutos y es así, que la presencia de los polifenoles con actividad antioxidante, debe ser más estudiada y ver como participa en los procesos fisiológicos, bioquímicos, celulares, así como su interacción en la inactivación de radicales libres en el tracto gastrointestinal de los seres vivos que las ingerimos.

La implementación del uso del desarrollo de colorantes naturales a partir de las berries, como colorante natural, puede ser muy útil para la industria alimentaria, donde este tipo de compuestos naturales, cada vez son y serán más necesarios sobre todo considerando la tendencia actual de consumir más colorantes naturales que artificiales en la alimentación.

Otro aspecto importante a investigar en relación a sus metabolitos secundarios, son la elaboración de sus antocianinas y cuáles son los principales precursores de estos. Lo que las convierte en una posibilidad de desarrollo de nuevos productos con un beneficio adicional para la salud de la humanidad en la industria farmacéutica.

Referencias

• Anttonen, J. M.; Karjalainen, O. R. 2005. Environmental and genetic variation of phenolic compounds in red raspberry. Journal of Food Composition and Analysis 18 (8): 759-769.

• Bowling BL. 2000. The berry grower´s companion. Timber Press, Inc. Portland, Oregon, USA. 284 p.

• Kahkonen M. P., Hopia A. I., Heinonen M. 2001. Berry phenolics and their antioxidant activity. J Agric. Food Chem. 49:4076-4082.

• Scalzo, J.; Currie, A.; Stephens, J.; McGhie, T.; Alspach LS, P. 2008. The anthocyanin composition of different Vaccinium, Ribes and Rubus genotypes. BioFactors 34:13-21.

• Yang, W.Q.; Harpole, J.; Finn, C.E.; Strik T, B.C. 2009. Evaluating berry firmness and total soluble solids of newly released highbush blueberry cultivars. Acta Hort. 810(2):863-868.

• Dra. Ma. Dolores García Suárez. Departamento de Biología. Laboratorio de Micropropagación y Propagación Vegetal. Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa.

• Dr. Héctor Serrano. Departamento de Ciencias de la Salud. Lab. de Biología Molecular y Regulación Endócrina. Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa.