Más de 25 personalidades de los ámbitos privado, público, social y académico trabajarán para enfrentar la pobreza rural; es la primera experiencia de este tipo en el país y asegura su éxito dada la calidad y probidad de los integrantes del Grupo.
• Sagarpa, UNAM y Rimisp son los convocantes del proyecto; el primer objetivo será consensuar un documento sobre las restricciones en el combate a la pobreza y las estrategias para resolverla con base en el diálogo y consultas con la sociedad.
En alianza, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y Rimisp-Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural, integraron hoy el Grupo de Trabajo sobre Pobreza Rural y Desarrollo, que involucra a más de 25 personalidades de los sectores público, privado, social y académico de México.
Este Grupo --que celebró su primera reunión de trabajo hoy por la mañana en las instalaciones de la UNAM-- fue conformado para el proyecto Conocimiento y Cambio en Pobreza Rural y Desarrollo, el cual ejecuta Rimisp de forma paralela en cuatro naciones de América Latina: México, Ecuador, El Salvador y Colombia, en donde existen casi 22 millones de pobres rurales.
En México, el Grupo de Trabajo sobre Pobreza Rural es encabezado por el rector de la UNAM, José Narro Robles, y por el secretario de Agricultura, Francisco Mayorga Castañeda.
Sus coordinadores son el subsecretario de Desarrollo Rural de la Sagarpa, Ignacio Rivera Rodríguez, y el director de la Facultad de Economía de la UNAM, Leonardo Lomelí. El secretario técnico del Grupo es José Antonio Mendoza Zazueta, quien fuera subsecretario de Desarrollo Rural de la Sagarpa en 1994-2000.
Julio Berdegué, investigador de Rimisp (centro que tiene su sede en Santiago, Chile), es el coordinador general del proyecto.
El proyecto Conocimiento y Cambio en Pobreza Rural tiene como objetivo contribuir a mejorar estrategias, políticas e inversiones nacionales y subnacionales enfocadas a la pobreza rural, y es financiado por el Fondo
Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA) y el International Development Research Center (IDRC) de Canadá.
Entre los participantes del Grupo de Trabajo están el subsecretario de Desarrollo Social y Humano de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Luis Mejía Guzmán; el profesor-investigador de El Colegio de México, Antonio Yúnez Naude; el gobernador constitucional de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo; el presidente honorario de Grupo Bimbo, Lorenzo Servitje; el presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Juan Carlos Cortés, y el presidente de Grupo Maseca, Roberto González Barrera, además de Rolando Cordera Campos, académico de la UNAM, y Gustavo Gordillo de Anda, experto en temas rurales, así como legisladores líderes en materia agrícola y de desarrollo rural.
José Antonio Mendoza destacó la importancia de conjuntar a un grupo tan plural y experto en los temas rurales. “Esta es la primera vez que en México tenemos una experiencia de este tipo alrededor del reto de la pobreza rural, y lo más relevante es el conocimiento, la capacidad y probidad ideológica y laboral de los participantes. La calidad de este grupo, y su visión integral, multidisciplinaria, multi-institucional, multifacética, garantizarán el éxito del proyecto y permitirán que realmente haya una incidencia en las políticas públicas contra la pobreza rural, que haya una mayor eficiencia y rapidez en el combate de este flagelo, que es un problema ya estructural, crónico de nuestro país”. Dijo que el Grupo está fortalecido por el liderazgo del rector de la UNAM, José Narro, y la participación comprometida del secretario de Agricultura Francisco Mayorga, y del subsecretario de Desarrollo Social y Humano, Luis Mejía.
En la reunión, los participantes reflexionaron acerca de la prevalencia de la pobreza rural. En las tres décadas recientes el país ha invertido cuantiosos recursos públicos y ha desarrollado diversas estrategias enfocadas a la superación de la pobreza y el impulso del desarrollo rural, con indicadores que bajan de manera muy lenta, de lo que dan cuenta algunas publicaciones.
Por ello surgieron las preguntas: ¿Por qué la pobreza rural persiste?, ¿es acaso un problema de diseño y ejecución de políticas públicas?, ¿es un problema acentuado por el modelo de desarrollo?, ¿es la falta de acuerdos y de coaliciones políticas entre los actores relevantes?, ¿es simplemente la necesidad de mayores recursos y de una mayor participación social?
El coordinador general del proyecto, Julio Berdegué, dijo que atender la pobreza rural no es sólo un asunto de justicia social. Hacerlo contribuirá a la estabilidad social y política.
Explicó que las personalidades participantes en el Grupo de Trabajo actuarán al margen de intereses partidistas. Son personajes que tienen la capacidad de acceso e interlocución con actores públicos y privados al más alto nivel y se espera que establezcan coaliciones políticas y de diálogo y que interactúen intensamente con el gobierno, pero de una manera independiente de éste. El Grupo, precisó, se reunirá periódicamente para trabajar sobre la base de una agenda autodefinida. Su horizonte de trabajo será de dos años.
El primer objetivo del Grupo será tener un documento consensuado sobre las principales restricciones que enfrenta el combate a la pobreza rural y las estrategias para resolverlas. Esto implicará reuniones regionales para escuchar la voz de la sociedad y de las autoridades municipales y estatales en las regiones con mayores grados de pobreza, en el sur-sureste de la República. “El proyecto implicará mucho diálogo”, dijo Mendoza Zazueta.
La iniciativa, surgida desde Rimisp, forma parte del Programa Dinámicas Territoriales Rurales, encabezado por el propio centro latinoamericano.
