Una historia de éxito culmina con resultados increíbles, y comienza con una idea y convicción de realizar una mejora para el campo. Es el camino que nos lleva a generar ideas creativas, cuyo objetivo sea optimizar el trabajo que desarrollamos; es así como han surgido los Maratones de Recolección, los cuales buscan ser la vía al éxito que promueva la recolección y la conciencia ambiental.

Este proyecto tiene sus inicios en el año 2011, y Tabasco fue el primer estado donde se realizó dicha actividad, invitando a todos a participar, preocuparse y ocuparse de intervenir en un lugar con baja incidencia de recolección de envases. Para el 2012, se realizaron cinco maratones de recolección; 27 en el 2013; y para el 2014, se obtuvo una recolección de más de 123 toneladas en 31 maratones.

Este año, el objetivo primordial es alcanzar la recaudación de más de 150 toneladas, por medio de la participación y la responsabilidad compartida de todos los involucrados en el manejo integral de los envases vacíos. El resultado del año 2014, fue arrojado de capacitaciones en toda la República Mexicana, y el apoyo y trabajo en conjunto de: distribuidores, usuarios finales, dependencias de gobierno y la industria asociada, con ello se rebasó la meta esperada.

Un ejemplo de lo anterior, es el maratón de recolección que se realizó en Delicias, Chihuahua, donde se recuperaron 14 toneladas de envases vacíos de productos para la protección de cultivos y afines. Del 15 al 18 de octubre, se ejecutaron labores para recuperar esos envases vacíos que no llegaban al Centro de Acopio Temporal más cercano, donde además de rescatar los envases, se fomentaba la cultura del Manejo Integral, es decir, de lo que en México se considera “residuos peligrosos”.

Por su parte, en Veracruz se recobraron siete toneladas, las cuales no hubieran llegado también a los Centros de Acopio Temporales o Primarios Autorizados. En esa ocasión, los apoyos no se hicieron esperar, y se contó con 40 vehículos de voluntarios para realizar la caravana de recolección; además, se otorgó atención e intervención en espacios para limpiar los campos mexicanos de aquellas zonas.

En el Estado de México, con el apoyo del ayuntamiento de Villa Guerrero, fueron realizados dos maratones de recolección, con los cuales se salvaron más de 10 toneladas de envases vacíos. Ejemplos de éxito tenemos muchos, sin embargo, para que una historia de triunfo se consolide, hace falta la participación de todos y la conciencia de la importancia que tiene el medio ambiente. Sobre todo, generar el empuje hacia los movimientos que realmente impacten de manera positiva en nuestra naturaleza.

Con estas historias, hemos aprendido que cuando se suman los esfuerzos, los resultados son superados y alcanzados. Asimismo, que la labor de concientización a la población sobre temas ambientales, es primordial para lograr un Campo Limpio. La historia no termina, continúa escribiéndose para seguir su camino al éxito.