¿Agricultura Ecológica u Orgánica?

La forma correcta de llamar a ésta agricultura es agricultura ecológica, los términos orgánica y biológica proviene de países de habla inglesa, el primero y el segundo de las lenguas germánicas. La denominación producción biológica es dada por franceses e italianos y producción ecológica por los alemanes. La denominación de agricultura orgánica ha sido la más difundida a nivel mundial y por ella se ha llegado a conformar los Principios Básicos de la misma, estableciendo en 1972, la Federación Mundial de Movimientos Orgánicos (IFOAM por sus siglas en inglés, International Federation of Organic Agricultural Movements).

El incremento poblacional de la humanidad, así como diferentes necesidades para incrementar y mejorar la explotación de los recursos agrícolas ha causado graves consecuencias, mermando la riqueza biológica de nuestro planeta. En la actualidad hemos retornado a la idea de rescatar los antiguos modelos de cultivo para así recuperar al planeta, utilizando técnicas tradicionales que reduzcan el uso de agroquímicos, respetando la vida tanto a nivel micro como macro en las tierras de cultivo, haciéndolas libres de contaminantes. Así ahora, denominamos a ésta agricultura como la agricultura ecológica, la cual a su vez presenta diferentes modelos, que ofrecen alternativas tecnológicas para los productores al ejercer una práctica armoniosa con la dinámica de los ecosistemas naturales.

Nuestros antepasados indígenas aplicaban sus conocimientos científicos y tecnológicos para lograr el cultivo de las plantas que eran su fuente de alimento, dentro de sus tradiciones se encontraba la práctica del trabajo colectivo; preparando surcos, deshierbando, cosechado y posteriormente buscando un extenso aprovechamiento del recurso obtenido, para fines medicinales o de alimento en un variado recetario.

El concepto sobre la agricultura ecológica, desde el punto de vista de su estudio y aplicación, se inicia a finales del siglo XIX en Alemania, a partir de las reformas agrarias y de lo que se conoció como la Revolución Industrial del Sector Agropecuario. Es a partir de entonces que han surgido diferentes direcciones e ideas para aplicar y estudiar los efectos de la agricultura hacia el medio ambiente.

La agricultura ecológica u orgánica, es conocida por favorecer la conservación del medio ambiente, respeta a la naturaleza y conserva así a la biodiversidad. Estrictamente hablando, la agricultura ecológica no emplea productos de síntesis química como abono o compuestos para combatir plagas y enfermedades, tampoco hace uso de transgénicos, es decir de organismos genéticamente modificados. Todo ello es con el fin de conservar la tierra, respetar la naturaleza y a su vez obtener el beneficio de alimentos que son más sanos para el consumo humano.

Los alimentos saludables también son de mayor calidad nutritiva, carecen de contaminantes al no utilizar sustancias de síntesis química, así la producción agrícola ecológica contribuye a incrementar y mantener la salud de los agro-ecosistemas, incluida la diversidad biológica, los ciclos biológicos y la actividad biológica del suelo que permite su uso de un modo equilibrado y optimizado.

Se considera que la producción ecológica contempla la mejora de las condiciones de vida de sus practicantes, logra la sustentabilidad integral del sistema de producción agrícola desde los aspectos social, ecológico y es económicamente sustentable.

En el cultivo ecológico, los agricultores pueden utilizar semillas cuyo origen son de cultivo convencional, no existen semillas producidas aún con un criterio ecológico, lo único que debe tomarse en cuentan es que no presenten modificaciones genéticas que alteren las variedades utilizadas en la agricultura tradicional y que sean variedades de semillas locales o bien adaptadas al entorno.

Salvia hispanica.

Para México una alternativa ha sido el retornar a cultivos tradicionales prehispánicos como son el cultivo de la chia Salvia hispanica y el amaranto Amaranthus hypochondriacus de este modo se retorna a rescatar, ideología, prácticas productivas y por ende, el retorno a valores culturales de nuestro México antiguo, donde prevalecían prácticas productivas más apegadas a una lógica ambiental.

Amaranthus hypochondriacus

En los cultivos ecológicos es recomendable en la medida de lo posible, el mantener una diversidad biológica, alternando o mezclando variedades distintas a fin de lograr proporcionar estabilidad, resistencia y capacidad de respuesta frente a sequías u otros cambios climáticos o bien el ataque de plagas o enfermedades.

La biodiversidad puede mantenerse por la integración de componentes a distintos niveles:

-Edáfico (lombrices, bacterias, hongos, nódulos de Rhizobium)

-Especies silvestres (un 30% de plantas adventicias)

-Rotación de cultivos.

El cultivo ecológico debe estar basado en métodos de prevención, de tal manera que las plantas presenten un buen desarrollo, sean fuertes y resistentes y por ende se incremente su resistencia natural a plagas y enfermedades.

Es recomendable que los cultivos sean los apropiados para el lugar de cultivo, siendo las especies autóctonas o nativas o bien variedades adaptadas a la zona, las que pueden presentar un mejor crecimiento además de que se debe de prever un buen abonado, equilibrado para mejorar los suelos y así hacer a las plantas más resistentes. El uso de plantas nativas trae la domesticación de especies atendiendo también aspectos ambientales y sociales. Los estudios etno-botánicos muestran estudios de especies vegetales del conocimiento del acervo cultural prehispánico y al mismo tiempo recopila las diversas localidades en las cuales se llevó a cabo una producción eficiente.

Uno de los componentes libres de químicos, que puede ser utilizado para fertilizar un terreno dedicado a la agricultura ecológica, es el uso de composta, que no es otra cosa que materia orgánica proveniente de desechos de organismos vivos en descomposición controlada; ésta se mezcla con el suelo a fin de nutrir a la planta y favorecer el complejo arcillo-húmico y promover el desarrollo de microorganismos del suelo. La rotación de cultivos evita el cultivo de una única especie, y al diversificar las especies plantadas se dificulta la aparición de plagas.

Es aconsejable promover el desarrollo de la fauna auxiliar autóctona. En México se han utilizado agaves como setos y la liberación de insectos útiles, tanto de parásitos como de depredadores. También se podrían utilizar diferentes productos de origen natural que no precisamente deben ser purificados, tal es el caso de el uso de flores secas de crisantemos que contienen compuestos como piretrinas que se utilizan como insecticida natural o el uso de bacterias aerobias como Bacillus turingensis, para el mismo fin.

La asociación de cultivos consiste en introducir en la misma parcela varias especies distintas, de forma tal que se obtiene una sinergia entre ellas. Las culturas prehispánicas practicaban técnicas para el uso sustentable de los recursos hidrológicos, para el incremento de la fertilidad de la tierra, técnicas para la conservación del agua y prevención de erosión de la tierra así como estrategias innovadoras agroecológicas, como fue el caso del ingenioso sistema de las chinampas, donde sembraban árboles como los ahuejotes que enraízan a través del agua hasta llegar a fondo de los lagos y así ir formando islotes con lodo muy propios para la posterior siembra como terreno agrícola.

"Bio Alemania” Logotipo de Alemania para productos provenientes de la agricultura ecológica

Agricultura ecológica en el mundo.

La agricultura ecológica en Europa, se encuentra regulada por la Unión Europea, a partir del 1 de enero de 2009 por el Reglamento (CE) 834/2007 del Consejo de 28 de junio de 2007 sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos, que deroga el antiguo Reglamento (CEE) 2092/91. Los alimentos orgánicos por su parte deben estar certificados y avalados por alguna empresa u organización evaluadora.

En él, se especifica claramente las técnicas autorizadas en este tipo de agricultura. Los productos ecológicos deben llevar obligatoriamente el sello oficial de la agricultura ecológica de la Unión Europea, permitiéndose añadir, además, los logotipos del país o región de origen (ver foto del logotipo de Alemania).

En la búsqueda del incremento de la producción de cosechas agrícolas, principalmente durante la Revolución Verde 1960-1990, la agricultura convencional no considero las consecuencias posteriores que acaecerían sobre el ambiente y la tierra misma.

Técnicas de la Agricultura Moderna

La agricultura convencional promovió y aplica aún lo que se considera como las técnicas de la agricultura moderna: la labranza intensiva del suelo, el monocultivo, el uso indiscriminado de químicos como fertilizantes sintéticos y el control de plagas y de plantas arvenses, pozos profundos así como la manipulación genética que incluso llega a la transformación de plantas en transgénicas, todo ello con el fin de promover un incremento en la producción que han causado estragos fuertes al planeta y a su biodiversidad. No se debe descuidar y negar que la aplicación de las prácticas e innovaciones tecnológicas convencionales incremente la producción agrícola, pero tampoco se puede negar que su práctica en actividades agrícolas deteriora los recursos naturales en forma considerable y ocasionalmente irreversible.

Daños Causados

Algunas de las múltiples consecuencias de la agricultura basada en agroquímicos y en el uso de grandes cantidades de energía son: el deterioro de la cubierta vegetal mediante la destrucción por tala, roce y quema de la vegetación original, la erosión del suelo por pérdida de nutrientes, agua así como por efectos eólicos, la contaminación de los suelos por la toxicidad de los químicos empleados así como también de un incremento en su salinidad, la reducción considerable de los mantos freáticos causada por los cambios en la superficie terrestre, la pérdida de diversidad agrícola biológica y genética, la resistencia constante de plagas y enfermedades agrícolas, el azolve de presas, las inundaciones naturales, la eutrofización de lagos y la contaminación del aire.

La agricultura ecológica resurge ante los múltiples factores negativos de la agricultura convencional, emerge la concepción de una agricultura que promueve la producción agrícola en donde se apoya en la conservación de los recursos naturales, el suelo, el agua y la biodiversidad.

La creciente población humana requiere solventar el abastecimiento de alimentos y a la vez conservar el planeta y su biodiversidad, la agricultura ecológica promete ser altamente productiva y a su vez sostenible en producción y conservación a largo plazo. Para atender este reto, actualmente se desarrolla la ciencia de la agroecología, la cual se define como la aplicación de conceptos y principios ecológicos al diseño y manejo de agro-ecosistemas sostenibles e implica la realización de prácticas agrícolas sustentadas en el conocimiento técnico y científico de los procesos ecológicos, agronómicos y sociales que ocurren para su producción.

La obtención de alimentos más saludables y la protección del medio ambiente por medio del uso de técnicas no contaminantes, actualmente se producen bajo un conjunto de procedimientos denominados "orgánicos", estos productos se encuentran libres de agroquímicos, sin alteraciones genéticas para su producción, disminuyen el empleo de energía y de sustancias inorgánicas, sobre todo si son de origen sintético, hacen uso de compostas para fertilizar y enriquecer con nutrientes el suelo

La producción y venta de alimentos ecológicos, vienen a dar respuesta a los consumidores y a la cada vez mayor atención que se presta a la alimentación como índice de buena salud. El conocimiento que actualmente se tiene respecto a la innecesaria ingestión de químicos, producto de las explotaciones agrícolas y ganaderas que son nocivos para la salud y que deterioran el medio ambiente

Como se menciono al inicio, en la actualidad se sabe que los alimentos ecológicos proporcionan además un aporte nutricional más completo que los convencionales y sus efectos en el organismo siempre serán positivos. Los alimentos ecológicos contienen un mayor porcentaje de vitaminas y minerales que los productos convencionales y menor porcentaje de agua, por lo que aportan más resistencia ante las enfermedades. Su desventaja se encuentra en el precio de venta ya que los alimentos ecológicos son más elevados que el de los convencionales aunque los consumidores bien informados aceptan este mayor precio de venta ya que realmente obtienen productos saludables de mucha mejor calidad

Dra. Ma. Dolores García Suárez Departamento de Biología

Laboratorio de Micropropagación y Propagación Vegetal.

Dr. Héctor Serrano Departamento de Ciencias de la Salud Laboratorio de Biología Molecular y Regulación Endócrina

Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa