Page 21 - Revista TecnoAgro Nº 97
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A SURCO ANGOSTO
*Por el Ing. Carlos Garay Ĺpez
S
e avecina la nueva temporada la se han obtenido datos ślidos sobre nir la nutricín, es un buen ańlisis
en Sinaloa y se tiene que estar la cantidad de los elementos esencia- de suelo obtenido de un laborato-
preparado con semilla, ferti-les que el cultivo de máz “consume” rio certiicado en el que se indique
lizante, agroqúmicos, maquinaria y por tonelada de grano producido. Una al elemento o elementos que es-
personal, a in de que la planeacín institucín dedicada al tema de la in- t́n limitando la productividad de la
de actividades por parcela resulte de vestigacín en fertilizacín, la cual ha parcela, y adeḿs sugiera las can-
manera beneiciosa y como en reali- publicado extensivamente diferentes tidades a ponerle al suelo de tales
dad se requiere. Es oportuno en este estudios sobre varios cultivos en di- elementos. El IPNI presenta una ta-
momento revisar las notas tomadas versos páses: el International Plant bla con los kilos o gramos de cada
en ãos pasados para mantener las Nutrition Institute (IPNI, antes Institu- elemento esencial requeridos por
buenas actividades; mejorar las que to Internacional del F́sforo y Potasio), tonelada de grano de máz absorbi-
no hayan funcionado, o adecuar- entre cuyos art́culos se encuentra dos por el cultivo, y las necesidades
las a las condiciones actuales, pues uno en especial que menciona estas para nueve toneladas por hect́rea
con ello las temporadas anteriores necesidades nutricionales del máz (ton/ha). Esta tabla se ha adaptado
se convierten en una buena fuente para su buen desempẽo.para suplir las cantidades de 15 y 20
de informacín propia muy coniable ton/ha, metas que puede probarse
para tomar decisiones acertadas de Se debe considerar que un apoyo en algunas parcelas que presenten
manejo del cultivo.esencial en este proceso de dei-condiciones de suelo y humedad
Un punto indispensable para al-
canzar el tonelaje de grano de máz
propuesto, llamado igualmente “Me-
ta de Rendimiento”, es aportar la
fertilizacín apropiada al cultivo en
forma oportuna, de manera que sus
necesidades de nutricín queden
satisfechas, y las plantas tengan los
elementos (Macro y Micro) para de-
sarrollar todo su potencial geńtico,
habiendo el clima y el agua suicien-
tes durante la temporada.
Ahora bien, ¿de d́nde se puede to-
mar el dato de las necesidades nutri-
mentales del máz?; afortunadamente,
por medio de la Investigacín Agŕco-