Técnicos internacionales proponen orientar investigación a encontrar plantas resistentes al HLB y aplicar el control biológico para disminuir poblaciones de Diaphorina Citri en áreas urbanas.
Para evitar que la actividad citrícola resulte severamente dañada con el Huanglongbing (HLB) es indispensable llevar a cabo un trabajo integral, a través de una red de especialistas en el tema, además de aplicar las medidas de control de su vector, eliminar fuentes de contaminación y plantas enfermas y usar frutales de vivero sanos, concluyeron más de 400 técnicos de 16 países que participaron en el 2º Taller Internacional sobre el HLB y el Psílido Asiático de los Cítricos (Diaphorina citri).
En este foro, organizado por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) y la Organización Norteamericana de Protección a las Plantas (NAPPO), los técnicos de Argentina, Brasil, Belice, Cuba, Colombia, Canadá, China, Costa Rica, Honduras, Panamá, Paraguay, República Dominicana, Estados Unidos, Guatemala, México y Sudáfrica, reunidos en la ciudad de Mérida, determinaron que de acuerdo con las experiencias obtenidas en Sao Paulo, Brasil y Florida, Estados Unidos, es fundamental que la estrategia de control de esta enfermedad se lleve a cabo de manera coordinada y regional.
Coincidieron en que para la sustentabilidad de la industria citrícola a largo plazo es indispensable encontrar porta injertos o variedades resistentes o tolerantes al HLB, por lo que también a ello debe orientarse la investigación.
Asimismo, consideraron que el control biológico es una herramienta eficaz para disminuir en el mediano plazo las poblaciones de Diaphorina Citri en áreas en las que no se pueden efectuar las medidas de control que se aplican en predios comerciales, tales como zonas urbanas.
Por ello, señalaron, es fundamental incrementar los recursos destinados a la investigación, ya que es la única manera en que se podrán obtener los resultados que harán sustentable a la citricultura.
Enfatizaron que la divulgación y capacitación a productores, viveristas y propietarios de plantas de zonas urbanas son determinantes para la detección oportuna y manejo del HLB y su vector.
El Director General de Sanidad Vegetal del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), Francisco Javier Trujillo, instó a los participantes a difundir en sus países la información que obtuvieron, pues, enfatizó el verdadero desafío y éxito de este evento es su efecto multiplicador.
El funcionario agregó que la agronomía tendrá que avanzar en la investigación, pero debemos pasar la información, asimilarla y sobretodo, aplicarla oportuna y comprometidamente.
En este foro, organizado por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) y la Organización Norteamericana de Protección a las Plantas (NAPPO), los técnicos de Argentina, Brasil, Belice, Cuba, Colombia, Canadá, China, Costa Rica, Honduras, Panamá, Paraguay, República Dominicana, Estados Unidos, Guatemala, México y Sudáfrica, reunidos en la ciudad de Mérida, determinaron que de acuerdo con las experiencias obtenidas en Sao Paulo, Brasil y Florida, Estados Unidos, es fundamental que la estrategia de control de esta enfermedad se lleve a cabo de manera coordinada y regional.
Coincidieron en que para la sustentabilidad de la industria citrícola a largo plazo es indispensable encontrar porta injertos o variedades resistentes o tolerantes al HLB, por lo que también a ello debe orientarse la investigación.
Asimismo, consideraron que el control biológico es una herramienta eficaz para disminuir en el mediano plazo las poblaciones de Diaphorina Citri en áreas en las que no se pueden efectuar las medidas de control que se aplican en predios comerciales, tales como zonas urbanas.
Por ello, señalaron, es fundamental incrementar los recursos destinados a la investigación, ya que es la única manera en que se podrán obtener los resultados que harán sustentable a la citricultura.
Enfatizaron que la divulgación y capacitación a productores, viveristas y propietarios de plantas de zonas urbanas son determinantes para la detección oportuna y manejo del HLB y su vector.
El Director General de Sanidad Vegetal del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), Francisco Javier Trujillo, instó a los participantes a difundir en sus países la información que obtuvieron, pues, enfatizó el verdadero desafío y éxito de este evento es su efecto multiplicador.
El funcionario agregó que la agronomía tendrá que avanzar en la investigación, pero debemos pasar la información, asimilarla y sobretodo, aplicarla oportuna y comprometidamente.