Desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), las exportaciones agroalimentarias mexicanas han crecido en más de 600 por ciento.
Gracias al trabajo de productores mexicanos y al apoyo brindado al campo, nuestro país podría posicionarse como el 11° productor de alimentos del mundo para los años 2017 y 2018.
Se le considera al campo mexicano un ejemplo de productividad, ya que se estima que por cada hectárea cultivada se obtienen alrededor de mil 800 dólares, cuando este promedio es menor en otros países que tienen mayor extensión.
A nivel mundial, nuestra nación ocupa actualmente el 12° lugar en producción de alimentos, por lo que, de continuar con un crecimiento similar al obtenido en los años recientes, va a ser posible superar a otros países latinoamericanos y ubicarse entre las primeras diez posiciones en el mediano plazo.
La productividad del sector, sumado a una mayor apertura comercial, ha permitido que la República Mexicana crezca en sus exportaciones agroalimentarias con ventas cercanas a los 10 mil millones de dólares en el primer cuatrimestre del año, y con una perspectiva de cierre de 30 mil millones de dólares para el 2016.