El Gobierno de México tiene en práctica programas para el manejo y sustentabilidad del suelo y agua, así como proyectos productivos que ejecuta la Comisión de las Zonas Áridas (CONAZA) en todo el territorio nacional.
El Gobierno de México tiene en práctica programas para el manejo y sustentabilidad del suelo y agua, así como proyectos productivos que ejecuta la Comisión de las Zonas Áridas (CONAZA) en todo el territorio nacional.
En las zonas áridas llueve poco, pero cuando llueve lo hace en forma torrencial, por eso se han tomado acciones ara que los escurrimientos de agua no degraden los suelos, se coseche el agua, se rehabiliten los suelos y mejoren las condiciones de los habitantes de estas zonas.
Las principales obras de infraestructura hidráulica para conservación de suelo son:
- Presas filtrantes, estructuras transversales al flujo de agua que evita el azolvamiento de las presas aguas abajo, éstas pueden ser de piedra acomodad o gaviones (caja de malla de acero rellena de piedras).
- Zanjas de infiltración tipo trinchera, éstas son un conjunto de excavaciones discontinúas que interceptan los escurrimientos superficiales y propician la infiltración del agua al subsuelo.
- Bordos y terrazas en curvas a nivel, aprovechan la escorrentía superficial infiltrando el agua, lo que atenúa la erosión hídrica y captan el agua para favorecer el desarrollo de pastos, plantas y árboles.
Otras prácticas de conservación son:
- Reforestación de especies nativas que regeneran las áreas altamente deforestadas y conservan la biodiversidad
- Cercos de exclusión que delimitan las áreas de vegetación natural y evitan el paso del ganado.
- Rehabilitación de suelo con rodillos aireadores que crean microcuencas, controlan la maleza y regeneran la vegetación con el fin de rescatar los pastizales.
Todas estas acciones, para preservar la piel del desierto no son suficientes sin los proyectos alternativos de producción que ejecuta la CONAZA y que permiten mejorar el bienestar de la gente radicada en éstas regiones, tales como:
- Fomento a las ganaderías bovina y caprina
- Fomento agrícola
- Producción de granos y hortalizas
- Acuacultura en el desierto con aprovechamiento del agua residual
- Producción agrícola en invernadero
- Entre otros.
La valoración de los recursos naturales de las zonas áridas requiere, innegablemente, de que todos conozcamos y entendamos el papel ecológico que cada elemento del desierto juega dentro de nuestro ecosistema.
