La berenjena Solanum melongena, es una planta comestible desde el siglo XVII, tras ser utilizada principalmente en la medicina contra inflamaciones cutáneas y quemaduras. Es una planta anual de la familia Solanáceae, contiene alcaloides que pueden resultar tóxicos para la salud, así que no es recomendable consumir el zumo o jugo de este fruto en demasía, debido esencialmente a la solanina; sin embargo, estas dosis nunca llegan a ser letales.

Se dice que el consumo del zumo de berenjenas es bueno como desintoxicante, ayuda a adelgazar, y es muy efectivo; no obstante, existen estudios que sugieren no beber en exceso estos concentrados por la presencia de la solanina, pudiendo ser tóxica. De las Solanáceas, son escasas las que son comestibles, es una familia con alrededor de 2,300 especies y dentro de las éstas, se encuentran: la berenjena, la papa, el jitomate y el pimiento.

La berenjena es originaria de la India, donde se cultiva desde hace más de 4.000 años. Fue introducida a España durante la Edad Media gracias a los musulmanes, cuando éstos ocuparon ese país, posteriormente pasó a Francia e Italia. Esta planta crece bien en climas cálidos a templados, y es sensible al frío sobre todo durante el período de crecimiento.

Las plantas de berenjena son herbáceas, con tallos lignificados que le dan el aspecto de arbustiva y anual; aunque pueden sobrevivir un segundo año si se cuida y se poda en forma adecuada; aunque la producción de los frutos al segundo año es menor. Su sistema radicular es profundo y fuerte, así como lo son sus tallos, éstos pueden ser erguidos o rastreros; en el primer caso, llegan a medir de dos a tres metros de altura. Las hojas están insertas en el tallo de forma alterna, presentan peciolos largos, son grandes y amplias con nerviaciones y espinas en el envés, además contienen vellosidades grisáceas, las cuales pueden llegar a causar alergias.

Se desarrolla en ramilletes de tres a cinco flores, una de las cuales es hermafrodita; el número de pétalos, sépalos y estambres oscila entre 6 y 9, éstos son de color violáceo y poseen espinas en el pedúnculo y cáliz, sus estambres son de tonalidad amarilla. El fruto es una baya alargada o globosa de color morado intenso, casi negro en su exterior, y su interior blanco, blanco jaspeado o verde; sus semillas son de color amarillo, un gramo de semillas coge entre 250 y 300 de éstas.

Su fruto contiene folatos, potasio, calcio, magnesio hierro y vitamina C; sin embargo, la berenjena no destaca por tener un alto valor energético o nutritivo, pues es de escaso contenido proteico; su residuo seco es inferior al 8%, y primordialmente está formado por agua. Existen otras variedades con formas más prolongadas y de color violeta menos intenso, o bien con frutos blanco a blanco verdoso, que poco conocemos en México.

Es un fruto muy recurrido en la alimentación internacional y en la de otras partes del mundo; no tanto en la cocina mexicana; pero ha tenido buena aceptación por la influencia de éstas en nuestro país. Pese a su sabor amargo, la consistencia que presenta, y su combinación con otras hortalizas, han hecho que su introducción hacia las zonas citadinas sea bien aceptada.

La solanina es de sabor amargo, considerada como una toxina se le encuentra de modo natural en varias partes de las plantas como las hojas, los frutos y los tubérculos de las especies pertenecientes al género Solanum, como en las papas Solanum tuberosum, tomates Solanum lycopersicum, belladona berenjena Solanum melongena, hierba mora Solanum nigrum; así como otros géneros pertenecientes a la familia Solanáceae, como el pimiento Capsicum anum.

La intoxicación por solanina se caracteriza por alteraciones gastrointestinales, como diarrea, vómito y dolor abdominal; alteraciones neurológicas, como alucinaciones, problemas oculares, dilatación de la pupila y dolor de cabeza. Para evitar sus efectos, es suficiente con una cocción adecuada; pues, su consumo en estado crudo y en grandes cantidades, causa envenenamientos. La cantidad de solanina que contiene la berenjena es inferior a la necesaria para producir una intoxicación de gravedad, pero de todos modos se recomienda ingerirla cocida.

Así pues, el contenido tóxico de solanina (cuando están maduros los frutos), es una dosis atóxica, y se puede reducir la toxicidad del alcaloide solanina tras freírla a más de 170 ºC. Las plantas que contienen el alcaloide solanina, poseen propiedades fungicidas y pesticidas como mecanismo de defensa natural, que les ayuda para protegerse de enfermedades y de depredadores, como insectos y otros.

En relación a su consumo por el humano, aunque con pocos estudios que demuestren su efectividad, la solanina es utilizada en el campo de la medicina como anticonvulsivante para tratar crisis epilépticas; como sedante y antigripal para tratar resfríos y gripes; sin embargo debe tenerse cuidado, pues tiene acción hemolítica y puede conducir a derrames cerebrales.

A la berenjena se le considera como con un papel benefactor antioxidante, debido a las antocianinas o flavonoides presentes en la epidermis que le confiere al fruto ese color morado intenso; y esto, a su vez ayuda a disminuir los niveles de colesterol mediante una modulación del metabolismo de los organismos que lo consumen; así también, estos compuestos contribuyen para la prevención de enfermedades cardiovasculares y del cáncer.

Para consumir el fruto, es recomendable sumergirlo en agua con sal durante algunos minutos antes de cocinarla para quitarle ese sabor amorgo que da la solanina; para que tenga buenos efectos contra el almacenamiento de grasas, es recomendable no freírla, sino asarla o cocerla en el horno, y es preferible consumirla cocinada. Se recomienda elegir berenjenas turgentes, con un buen aspecto de su epidermis exterior, pues las viejas pueden resultar duras.

De acuerdo con la FAO, la producción de berenjena se encuentra concentrada en cinco países en un 90%, siendo China el principal productor con un 58%; India con 25%; Egipto Irán y Turquía, y le seguirían Japón, Italia y Filipinas. En el mundo se cultivan actualmente cerca de 1,600,000 hectáreas con berenjena.

CULTIVO DE BERENJENA EN EL MUNDO

La berenjena es un cultivo importado, que al igual que otros productos hortofrutícolas originarios de otros continentes. Han encontrado en México las características ambientales adecuadas para su desarrollo; es por ello que se ha ido incrementando la superficie dedicada a su cultivo, y la producción se ha duplicado en los últimos años. Del mismo modo, su consumo a nivel interno en los mercados nacionales, ha ido tomando importancia y conocimiento sobre esta actividad.

Es una hortaliza que en poco tiempo se ha introducido, y además ha mostrado perspectivas favorables tanto para su cultivo, su consumo interno y su competitividad en la exportación en los mercados internacionales; aspecto que puede brindar también buenas perspectivas a nivel económico, ayudando a los productores con entradas adicionales, y dejando de competir con otras hortalizas algunos mercados ya saturados.

Dra. Ma. Dolores García Suárez. Departamento de Biología, Laboratorio de Micropropagación y Propagación Vegetal. Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa.
Dr. Héctor Serrano. Departamento de Ciencias de la Salud. Lab. de Biología Molecular y Regulación Endócrina. Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa.