Las nuevas generaciones buscan opciones tanto para su protección como su bienestar, en la agricultura pasa exactamente igual. En este caso aplica el uso de prueba y error, para obtener resultados.”
La micorriza está constituida por una asociación de hifas fúngicas que al estar en contacto con las raíces de las plantas, las pueden envolver formando un manto y penetrarlas de manera intercelular a través de las células del córtex. Las hifas se ramifican en el suelo, de tal forma que crean una red muy extensa de interconexiones subterráneas, ya sea a las raíces de la misma planta o de otras especies.
Esta red permite el libre flujo de nutrimentos hacia las plantas hospederas y entre las raíces de las plantas interconectadas. Lo que establece una gran unión bajo el suelo entre ellas, que a simple vista, podrían parecer lejanas y sin relación alguna. De esta manera, la micorriza ofrece diferentes beneficios en términos de sobrevivencia y funcionamiento, tanto para la planta hospedera como para el ecosistema.
Trappe define a las micorrizas como “órganos de absorción doble que se forman cuando los hongos simbiontes viven dentro de los órganos sanos de las plantas terrestres, acuáticas o epifitas”. Esto es, que la planta le proporciona al hongo carbohidratos y un microhabitat para completar su ciclo de vida, mientras que el hongo le permite a la planta una mejor captación de agua y nutrimentos minerales con baja disponibilidad en el suelo, como defensas contra patógenos. Por esta razón, ambos se benefician y esta asociación se considera como: mutualismo.
En el 90% de las plantas está presente, así como en todos los ecosistemas y gradientes latitudinales. Cabe mencionar que existen hongos que se localizan en diferentes tipos de suelo y climas, en otras palabras, están adaptados a diversos hábitats aunque los factores tanto físicos como químicos pueden ser causa restrictiva de su distribución.
La micorriza tiene como función primordial, facilitar a la planta la adquisición y absorción de agua, fosforo y nitrógeno. Aunque esta asociación brinda otros beneficios como la protección al ataque de parásitos, hongos patógenos y nematodos, el aumento de su resistencia a la herbívora, influyendo en la producción de sustancias defensivas por parte de la misma planta, la limitación de la absorción de metales pesados tóxicos como el zinc y el cadmio. Así como el aumento del área de exploración de la raíz, mejora de las propiedades físicas y químicas del suelo mediante el enriquecimiento de materia orgánica y la formación de agregados por la adhesión de partículas, que le permite dar estructura y estabilidad al suelo reduciendo la erosión y mejor capacidad de retención del agua.
Ante los problemas ambientales y ecológicos a los que nos enfrentamos actualmente, esta asociación beneficia de manera tal, que las plantas en el ámbito agrícola o forestal, se vuelven más resistentes a las condiciones adversas del ambiente como lo son: la falta de agua y nutrimentos, al ataque de microorganismos fitopatógenos o plagas, así como un estímulo mayor para su crecimiento y una mejor adecuación. c