“El actual modelo de agricultura, ha tenido un impacto en la naturaleza, que implica crear una agricultura más sostenible, para que al reponer lo que se toma de ella, pueda también satisfacer las necesidades de las personas y al mismo tiempo sea suficiente para los seres vivos que comparten la biosfera.”
Fuente: FAO
La FAO (Organización de las Naciones Unida para la Alimentación y la Agricultura), ha presentado un libro con aportaciones de 78 científicos en el que aborda la forma de mejorar nuestros sistemas alimentarios. La agricultura a nivel mundial deberá adoptar un modelo más sostenible y de más calado que el que tuvo hace décadas la Revolución Verde. Esta evolución agrícola se extrae del nuevo libro presentado por la FAO.
“Hemos llegado al límite del paradigma de la revolución verde”, asegura el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.
Según la FAO, esta Revolución supuso el aumento de la productividad pero dejó sin resolver otros problemas. “No podemos seguir produciendo alimentos de la misma forma en que lo hemos hecho, apoyados en técnicas agrícolas intensivas, insumos químicos y mecanización, necesitamos cambiar a un enfoque más integrado sobre la sostenibilidad”, añade Graziano da Silva.
El libro consiste en un volumen de 585 páginas que reúne el trabajo de 78 expertos de la FAO, así como de una amplia gama de universidades y organizaciones de todo el mundo. En el libro se abarcan temas que van desde la demografía y la pobreza rural, hasta la biodiversidad y la escasez de agua, al tiempo, que incluye ejemplos viables de cómo aumentar la productividad agrícola mediante la integración de diferentes sectores, sin dañar el capital social y ambiental existente.
De acuerdo con la FAO se debe conseguir una agricultura y alimentación sostenible, así como superar la Revolución Verde para un futuro sostenible. Shivaji Pandey, uno de los editores del libro, explica que se debe buscar un alcance mayor al de la Revolución Verde. Desde la década de los 60´s esta revolución significó el uso intensivo de los recursos naturales y de grandes insumos como pesticidas químicos, incrementando así los rendimientos agrícolas a costa de un alto impacto ambiental.
Este aumento de la productividad, supuso “salvar mil millones de vidas” mejorando cultivos como el trigo, principalmente en la India y Pakistán.
El objetivo según el libro, es conseguir una agricultura y alimentación sostenibles en todo el mundo. Que deberán incluir todos los sectores, desde la agricultura o la ganadería, hasta la gestión de bosques, pesca y acuicultura. La práctica más sostenible debe servir para reducir la pobreza rural, garantizar la nutrición de toda la población, cuidar el medioambiente y hacer frente al cambio climático.
Para eso Pandey llama a fomentar la comunicación y el flujo de información entre productores, científicos, políticos e instituciones, además de “facilitar la participación de un sector privado bien regulado”.
Retos sostenibles de futuro para acabar con el hambre en el mundo
Pandey también cree que el futuro agrícola pasa por empoderar a las mujeres, invertir recursos públicos y mejorar el acceso al crédito y los mercados para los agricultores. Según la FAO, la producción agrícola debería crecer un 40% para acabar con el hambre en el mundo para 2050, cuando habrá cerca de 10.000 millones de individuos, siempre que los sistemas productivos sean más sostenibles y la distribución de ingresos y alimentos más equitativa.