Ropa cara, buen ingreso al productor

El algodón ha sufrido alzas considerables en los precios internacionales. Hoy los consumidores ya resienten en sus bolsillos el incremento en los precios de la ropa, principalmente las camisas y ropa interior. En un año los precios se elevaron en más de 150 por ciento, lo cual beneficiará a los productores nacionales, pero afectó al consumidor.

De acuerdo con información de los mercados mundiales, en marzo de 2010 el precio internacional de la fibra promedió los 80 centavos de dólar por libra, y en el mismo mes de este año llegó a los 213.18 centavos de dólar, un alza de 167 por ciento.

El mayor precio del algodón a nivel mundial se debe a una menor producción en Asia y Medio Oriente derivada de afectaciones climáticas o plagas, así como al cierre a las exportaciones de algunas naciones.

Los productores nacionales estiman que sus utilidades mejorarán hasta en 50 por ciento. “Los precios han motivado que las siembras, que iniciaron en abril, sean mayores; se pronostica que nuestras utilidades mejoren entre 20 y 50 por ciento”, previó Rubén Ortega, presidente del Consejo de Productores de Algodón en Chihuahua.

Agregó que los productores afectados por las pasadas heladas en Sinaloa y Tamaulipas podrían sumarse a la siembra de algodón, con lo que aumentaría la producción.

La industria textil demanda anualmente 1.9 millones de pacas de algodón. Hasta la década de los 60, México era autosuficiente en algodón, pero la producción fue siendo sustituida por otros cultivos, y desde los 90, México debe importar el 50 por ciento de la demanda industrial.
Este beneficio al productor se debe cuidar también en el consumidor. Camisetas, ropa interior para hombres, prendas de mezclilla, pantalones de gabardina, sábanas, camisas y toallas, son algunas de las prendas que aumentaron hasta 30 por ciento su precio, destaca información de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido.

“Se ha triplicado el precio del algodón y hay presión en petróleo; las implicaciones de esto serán efectos en inflación; no podemos absorberlo; las prendas que utilizan 100 por ciento algodón aumentarán 30 por ciento en el precio al consumidor a partir de marzo”, detallaron.
Las prendas de vestir que pueden mezclarse con otras fibras como el poliéster, también sufrieron alzas, pero menores; previó que serían entre 10 y 15 por ciento, ya que los derivados del petróleo también se han encarecido.

“En el último trimestre hemos monitoreado los precios de las telas y registramos alzas de 30 a 50 por ciento y lo que hacemos es buscar otras opciones de fibra, pero el petróleo presiona los precios del poliéster, aunado a que está muy demandado por toda la industria, eso hace que las prendas en las que se mezcla la fibra también aumenten”, puntualizan.
Aunque el alza de precios en la fibra se ha registrado desde el verano del año pasado, la industria no ha aumentado los precios, porque se trataban de entregas pactadas, pero a partir de marzo ya no fue posible mantener los mismos precios.
Las mezclas de fibras serán una solución para reducir el impacto, pero habrá prendas que no lo permitan, ya que el consumidor no las acepta, es por ello que las camisetas, ropa interior, camisas, mezclilla y blancos tengan un mayor incremento en el precio.