El Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación de México, Francisco Mayorga Castañeda, se pronunció por tomar medidas que permitan generar equidad en los mercados agrícolas y asegurar el abasto de alimentos a nivel mundial.

Para ello, propuso concluir con las negociaciones de la Ronda de Doha, acelerar los esfuerzos para dar forma a un sistema internacional de información de mercados agrícolas y establecer normas y estándares de calidad que ayuden a referir los precios de los productos.

Durante su participación en la Reunión Ministerial de Agricultura del “G-20”, realizada en esta ciudad, el funcionario mexicano estableció que el fortalecimiento de la seguridad alimentaria y la reducción de la volatilidad en los precios de los alimentos requiere un comercio más justo y abierto.

Las restricciones comerciales, las barreras no arancelarias o la imposición de requisitos sanitarios y fitosanitarios sin base científica, agregó, limitan el libre flujo de productos en detrimento de las oportunidades de exportación para los productores o del abasto para los consumidores.

La conclusión de la Ronda de Doha es una condición indispensable, dijo, para avanzar en la integración de los mercados y establecer nuevas disciplinas para el comercio internacional en materia agropecuaria.

En este punto, México, a través de la SAGARPA, promueve un mayor acceso a los mercados, la reducción sustancial de los apoyos distorsionantes de la producción y el comercio, y la eliminación de los subsidios y restricciones a la importación. Un paso deseable es reconocer a las negociaciones de la Ronda como el principal instrumento para fortalecer el comercio multilateral de alimentos, agregó.

Ante sus homólogos de los países más industrializados y relevantes economías en desarrollo, Francisco Mayorga puntualizó que “los acuerdos para la reducción de los apoyos que distorsionan la producción y el comercio brindarán mayor certidumbre para los productores y establecerán condiciones más equitativas para fortalecer el comercio y la inversión, sobre la base de las ventajas competitivas y no sobre la capacidad financiera de los gobiernos”.

Otro de los temas más sensibles para avanzar se refiere a generar un sistema internacional de estándares o normas de calidad que ayuden a establecer los precios de los productos agrícolas.

Sobre la necesidad que tiene el mundo de aumentar la producción de cultivos básicos y la recomendación de hacerlo mediante la cooperación científica y tecnológica, el titular de la SAGARPA enfatizó que México puso en marcha recientemente el Programa de Modernización de la Agricultura Tradicional (MasAgro), cuyo fin principal es elevar los rendimientos en maíz y trigo con acciones multianuales que benefician a pequeños productores.

“México ha comprometido con el Centro Internacional para el Mejoramiento del Maíz y el Trigo (Cimmyt), que pertenece al Grupo Consultivo para la Investigación Agrícola Internacional (CGIAR, por sus siglas en inglés), un ambicioso programa multianual para elevar la productividad de pequeños productores de maíz y trigo, en condiciones de temporal, y está abierto a compartir con otros países los resultados tanto de la investigación como de las acciones que se realizan”, subrayó.

Finalmente, en su intervención se comprometió a trabajar en el seguimiento e implementación del ambicioso Plan de Acción sobre la Volatilidad de los Precios de los Alimentos y la Agricultura del “G-20”, encaminado a fortalecer la seguridad alimentaria, el cual se dio a conocer hoy y que entre sus puntos destaca:

1. Mejorar la producción y productividad agrícola a largo plazo para responder a la demanda creciente, entre cuyos componentes está la adaptación al cambio climático.

2. Incrementar la información y transparencia del mercado para mejorar expectativas de gobiernos y operadores económicos.

3. Fortalecer la coordinación de políticas internacionales para mejorar la confianza en los mercados mundiales y manejar las crisis alimentarias de forma más eficiente.

4. Desarrollar herramientas de gestión de riesgos para los gobiernos, las empresas y los agricultores más vulnerables, con el objeto de mejorar su capacidad para manejar y mitigar la volatilidad de precios en los alimentos, con énfasis en los países más pobres.
 
En este punto es de destacar que la SAGARPA realiza la cobertura de precios mediante la contratación de opciones sobre futuros, mantiene esquemas contractuales de comercialización, fomenta una cultura de administración de riesgos en el sector agropecuario nacional y opera el Programa de Prevención y Manejo de Riesgos.

5.  Mejorar el funcionamiento de los mercados de commodities agrícolas (regulación financiera).

De manera concreta, destaca la iniciativa para echar a andar el Sistema de Información sobre los Mercados Agrícolas, en un esfuerzo por transparentarlos.

Los ministros de Agricultura y sus equipos técnicos trabajaron los documentos para alcanzar el plan de acción que se dio a conocer este día, convocados por el Gobierno de Francia en el marco del “G-20”.

Al término, el Ministro de Agricultura de Francia, Bruno Le Maire; el Presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick; el Secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, y el Director General de la FAO, Jacques Diouf, ofrecieron una conferencia de prensa e intervenciones en lo particular para detallar los resultados de la reunión.